El uso de impresoras en las empresas supone aproximadamente un gasto anual entre el 1 y el 3 % del total. Es un desembolso importante que puedes reducir fácilmente si implantas una política general de reducción de costes y cambias determinadas costumbres en tu negocio. En este artículo te mostramos algunos consejos prácticos que puedes llevar a cabo desde hoy mismo.
Estas medidas son muy sencillas de poner en práctica y no necesitarás intervenir con demasiada frecuencia. Te aseguramos que no te supondrá mucho esfuerzo, pues solo tendrás que prestar un poco de atención y ser constante para beneficiarte de sus resultados.
Realizar copias en color puede suponer un gasto seis veces superior que el de una impresión en blanco y negro. Por tanto, piensa si las impresiones en color van a aportarte algo de valor y si son realmente necesarias. Por eso, te recomendamos que configures de forma predeterminada las impresoras para que funcionen en blanco y negro.
Otra forma de ahorrar costes es reducir la calidad con la que se realizan las copias: borrador, fotográfica o mejorada. Utilizar la opción más adecuada en cada momento puede alargar sensiblemente la duración de los cartuchos de tinta, ya que no siempre necesitarás impresiones de la máxima calidad. Este simple gesto puede reflejarse hasta en un 50 % menos de uso de tinta.
Te ayudará a reducir considerablemente el gasto de papel. Si tu empresa tiene un elevado volumen de impresión, consumirás muchas menos hojas y lo notarás mes a mes.
Es, probablemente, la medida que más impacto tiene en las impresoras para empresas y, además, la más sencilla de llevar a cabo. Un tóner original de alta capacidad repercute en la reducción de gastos, más incluso si los adquieres en paquetes de varias unidades. La diferencia puede ser enorme en el coste por página, ya que estos cartuchos están diseñados para optimizar su capacidad de impresión.
Estos dispositivos pueden configurarse para aprovechar los modos que disponen de bajo consumo. Con ello, reducirás el consumo de energía eléctrica y lo verás reflejado en la factura.
¿Sabías que el uso de determinadas fuentes ayuda a reducir el gasto de tinta? Pues así es. Cada vez son más las fuentes que están pensadas para ahorrar tinta en las impresiones (Ecofont Sans, Courier, Garamond, Calibri, Century Gothic y muchas más). Ten en cuenta también el tamaño de la letra (a mayor tamaño, más gasto).
Con estos sencillos consejos podrás comprobar que el gasto que realizan tus impresoras se ve reducido notablemente.
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