Verifactu 2027: Aplazamiento confirmado y cómo preparar tu empresa

Hace unos dias el gobierno publicó en todos los medios y quedando confirmado oficialmente en el BOE: Se amplía el plazo para la implantación obligatoria del sistema Verifactu hasta el 1 de enero de 2027. 

Esta prórroga supone un año adicional de margen para que empresas y autónomos puedan adaptarse a uno de los mayores cambios en materia de facturación de los últimos años. Un cambio que no se elimina, solo se retrasa… y que sigue siendo obligatorio. 

Desde Solitium Control Group valoramos esta decisión como una oportunidad positiva, siempre que se utilice bien este tiempo adicional: para planificar, formarse y realizar una transición ordenada. 

¿Qué implica exactamente el aplazamiento de Verifactu? 

El sistema Verifactu, impulsado por la Agencia Tributaria dentro del marco de la Ley Antifraude, pasa a ser obligatorio a partir del 1 de enero de 2027 (con implantación escalonada según tipo de contribuyente). 

Hasta ahora, los plazos estaban fijados para 2026, lo que generaba una gran presión sobre empresas, autónomos y proveedores de software. Con esta prórroga: 

• Se gana más tiempo para la adaptación técnica. 
• Se facilita una implantación progresiva y ordenada. 
• Se reduce el riesgo de implantaciones apresuradas y errores críticos. 

Pero atención: Verifactu no desaparece ni se debilita. El cambio es solo de calendario, no de objetivo. 

Más tiempo para Verifactu pero no para esperar al último momento 

Este año adicional permitirá a las empresas abordar la transición con calma, garantizando una implantación más ordenada y con tiempo para formación y ajustes. 

La experiencia dice que los grandes cambios normativos siempre generan acumulación de última hora, colapso de proveedores, prisas, errores y decisiones precipitadas. Precisamente por eso, este aplazamiento debe entenderse como un impulso a la preparación, no como una invitación a retrasarlo todo. 

Ahora es el mejor momento para: 

• Analizar los sistemas actuales.
• Evaluar si el software cumple con la normativa Verifactu.
• Planificar mejoras sin presión.
• Formar a los equipos.
• Evitar riesgos futuros. 

¿Qué ocurre con las empresas que ya están adaptadas? Y ¿para quienes aún no han comenzado? 

Las empresas que ya han implantado su solución Verifactu se encuentran en una posición claramente ventajosa: 

• Su adaptación sigue siendo totalmente válida.
• Ya trabajan con un sistema más seguro, trazable y transparente.
• No necesitan realizar ningún cambio adicional por el aplazamiento.
• Están protegidas ante inspecciones, sanciones y problemas de cumplimiento. 

En la práctica, estas empresas han convertido la obligación en una ventaja competitiva. 

Para quienes todavía no han iniciado la transición, el nuevo plazo abre una ventana clave: 

• Más margen para elegir la solución adecuada. 
• Posibilidad de hacerlo de forma progresiva y sin urgencias. 
• Capacidad de repartir la inversión en el tiempo. 
• Mayor tranquilidad operativa. 

Ahora es el momento ideal para preparar la transición sin la presión del último minuto. 

Esperar a que el plazo sea inminente solo aumenta el riesgo de: 

• Sobrecostes.
• Falta de soporte técnico.
• Elecciones de software poco acertadas.
• Problemas con Hacienda en los primeros meses de obligatoriedad. 

Verifactu, factura electrónica y Ley Antifraude: no confundir conceptos

El aplazamiento afecta al sistema Verifactu, que regula cómo deben funcionar los programas de facturación para garantizar la inalterabilidad, trazabilidad y control fiscal. 

Muchas empresas confunden Veri*factu, factura electrónica y la Ley Antifraude, pero, aunque están relacionados, cumplen funciones distintas dentro de la digitalización fiscal. 

Veri*factu regula cómo debe funcionar el software de facturación, asegurando que las facturas sean inalterables, trazables y controlables por Hacienda. No define el formato del documento, sino cómo se gestiona y se guarda electrónicamente. 

La factura electrónica, en cambio, se refiere al formato del archivo, como Facturae o UBL, que se intercambia entre empresas y autónomos o con la Administración. 

La Ley Crea y Crece obliga a que todas las relaciones comerciales entre empresas y autónomos se realicen mediante factura electrónica, mientras que la Ley Antifraude establece los requisitos para que los sistemas informáticos sean seguros y no permitan alteraciones ni fraude. 

Esto es independiente, en resumen :  

• La factura electrónica cómo formato.
• Las obligaciones derivadas de la Ley Crea y Crece.
• El control de los sistemas informáticos por la Ley Antifraude. 

Distintos conceptos, mismo objetivo: una facturación totalmente digital, segura y controlada por Hacienda. El calendario de implantación puede ajustarse, pero el destino final es el mismo.Todo forma parte del mismo proceso de digitalización fiscal del país. 

Nuestro compromiso: acompañarte durante todo el proceso 

Desde Solitium Control Group reafirmamos nuestro compromiso con todas las empresas y profesionales: 

• Asesoramiento personalizado.
• Implantación de soluciones adaptadas a Verifactu.
• Formación para equipos.
• Soporte técnico continuo.
• Acompañamiento antes, durante y después de la adaptación. 

El objetivo es claro: que llegues a 2027 con tranquilidad, seguridad jurídica y sistemas perfectamente adaptados. 

El reloj ha ganado tiempo, pero sigue corriendo 

El aplazamiento de Verifactu a 2027 es una excelente noticia para planificar mejor, pero no es un “respiro definitivo”. Es una prórroga estratégica, no una cancelación. 

Las empresas que aprovechen este tiempo jugarán con ventaja. Las que esperen al último momento volverán a enfrentarse a prisas, costes innecesarios y mayores riesgos. 

Desde Solitium Control Group seguiremos impulsando Verifactu como lo que es: 
un paso clave en la modernización empresarial, la transparencia fiscal y la seguridad contable. 

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